Un avantage pour les producteurs d’agriculture biologique entre la sécheresse en Espagne CESS Recientemente, España ha sido afectada por una sequía que ha reducido las plantaciones en un 20% en promedio. Sin embargo, los productores de la agricultura ecológica respiran con alivio gracias a una mejor gestión del agua. Aunque también sufren las consecuencias de la falta de lluvia, lo hacen en menor medida.
En estas circunstancias , la falta de disponibilidad de agua es un problema que afecta a todos por igual. Sin embargo, los agricultores de producción ecológica tienen una ventaja ya que todos los cultivos tienen sistemas para reducir y mitigar el consumo de agua.
Según el presidente de la Asociación Profesional Española de la Producción Ecológica (Ecovalia), Álvaro Barrera, lo que distingue a la agricultura ecológica es la capacidad del suelo de retener el agua gracias a su estructura natural.
De manera más gráfica, Barrera describe la diferencia entre la agricultura ecológica y convencional como una persona que, después de comer algo muy picante, necesita un vaso de agua. En una comparación, una persona tiene el vaso a mano para aliviar la sensación, mientras que la otra no lo tiene. En este caso, la agricultura convencional representa la persona sin agua y la ecológica, la persona que sí la tiene.
En la agricultura convencional, el uso de compuestos químicos y fertilizantes genera una mayor retención del agua en el suelo, dejando a las plantas sin un suministro adecuado en épocas de sequía. Por otro lado, en la agricultura ecológica, los cultivos pueden recurrir al agua almacenada en el suelo para sobrevivir en estas condiciones.
Aunque la agricultura ecológica no está exenta de problemas, como el encarecimiento de insumos, se trata de una opción a considerar en momentos críticos como estos. Además, varias iniciativas, como la “farm-to-table”, buscan una distribución más directa de los productos ecológicos, mitigando los efectos de posibles aumentos en los precios.
Mientras tanto, el consumidor muestra su interés por consumir productos ecológicos, con un gasto promedio de 60 euros por persona al año. Según datos de Ecovalia, durante el 2022 el consumo de estos productos aumentó un 45%. Además, se observa un crecimiento en la superficie ecológica certificada en los últimos cinco años, llegando a 2,64 millones de hectáreas en España.
En resumen, la agricultura ecológica en España continúa creciendo y compitiendo con la agricultura convencional, con una mayor capacidad para enfrentar problemas como la sequía y una mayor aceptación por parte del consumidor. Además, se espera que iniciativas y prácticas como la gestión del agua en el suelo y una distribución más directa de los productos sigan impulsando este crecimiento en un futuro próximo. Si quieres conocer más sobre este tema, puedes contactar con nuestra sección de Medio Ambiente: [email protected].
source : Diario Córdoba
